Vehemente, extremista e intransigente llego a la arena política de nuestro país en un momento en el que las aguas estaban muy revueltas y su discurso marcado por escorpio atacando las bases de lo establecido, la corrupción  y tantas otros manejos sucios que forman parte de nuestro panorama político hizo que mucha gente viese en su figura el cambio necesario e imprescindible para nuestro país.

Sin embargo y como observamos en su tema natal, ya estamos presenciando su incapacidad para trabajar en equipo, para llegar a acuerdos con alguien que piense ligeramente diferente a él. Su partido político “Podemos”, desde su punto de vista no es un equipo, su partido político es el.

No está por la labor de colaborar con otros partidos y sus tránsitos actuales refuerzan todavía más su intransigencia natal. No sería de extrañar que le veamos perdiendo apoyos no solo de los votantes en general, sino también entre las filas de su propio partido.

Analizando su tema natal podemos entender porque el Sr. Iglesias  no considera el gobierno Venezolano una dictadura.  Creo que si tuviese la oportunidad el haría lo mismo ya que su forma de entender y manejar los cambios es radical.  Destruyamos todo, arranquemos todos los cimientos y volvamos a construirlo como él considera que deberían de funcionar sin admitir ideas que no sean las suyas. En otras palabras la definición de dictadura.